Para Daniela
Para Daniela:
Hola Dani, hace tiempos te dije que tenía algo que
escribirte con respecto a tu viaje a Francia, tu escrito llamó mi atención y
quiero darte una respuesta a ese escrito por este medio. En parte porque me
sentí identificado con tu escrito, es lo que pensaba yo hace unos años en mis
primeros viajes, y segundo porque he estado dos veces en Francia, es un país
muy lindo y hay que saber disfrutarlo.
Primero, me alegra mucho el hecho de que hayas
aceptado ese reto para tu vida, viajar a otros países nos llena de conocimiento
cultural y experiencias de vida inolvidables, conoces gente, costumbres, nuevos
amigos, comida nueva, en fin, muchas cosas nuevas. Antes de darte unos
consejos, quiero responder (desde mi punto de vista) la pregunta que mencionas
al principio: ¿No les ha sucedido que han esperado algo un tiempo y cuando
se da no están seguros si es lo que en realidad quieren? Claro que me ha
pasado, y es completamente normal, y hay una palabra con la que describiría la
respuesta: Miedo. Cuando ya obtienes lo que querías y luego empiezas a dudar,
algo como ¿si seré capaz con esto? ¿Ahora qué va a pasar? Pienso que es una de
las formas más bonitas del universo de ponernos a prueba, de retarnos a
nosotros mismos, y créeme que siempre es mejor decir sí, sí quiero hacerlo y lo
lograré.
Vivir en otro país expandió mi visión cultural,
espiritual y de la vida. Espero que así sea para ti. Un ejercicio
que he aplicado durante mis viajes y estoy seguro que me ha ayudado mucho, es
cuando no vez a las personas como simples entes que no te aportan nada, sino que los ves como fuentes de conocimiento, personas de las
cuales vas a aprender de su cultura, de su forma de solucionar problemas y de
ver la vida. Muchas veces sus formas de pensamiento lo ayudan a uno mismo a
superarse, a cambiarse, a renovarse como persona, a librarse de
muchas inseguridades que la sociedad Colombiana, nuestra comunidad y a veces
nuestra familia nos implanta directa o indirectamente.
Para concluir este pequeño escrito quiero decirte que te deseo lo mejor,
recuerda pensar en positivo, abre tu mente a todas las experiencias, allá nadie
sabe sobre ti, eres una persona nueva, te sentirás observada, diferente, extranjera. Da lo mejor de ti, disfruta, ríe y llora si es necesario, pero
¡nunca te rindas!
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